Hoy comienza un nuevo curso escolar y con él nos subimos al “Tren del Manjón”. Un viaje en tren que para nuestro alumnado empieza cuando tan solo tiene tres añitos y termina en sexto de primaria, instante en el que se bajarán de este tren y se subirán a otro para seguir su andadura educativa. Cuando llegue ese momento, padres y madres, maestros y maestras, y demás miembros de la comunidad educativa, tendremos la gran emoción de verlos llegar cargados con un equipaje que no tenían cuando embarcaron.

Cada estación a la que llegamos es un distinto curso escolar y ahora nos toca subirnos para emprender nuestro viaje hacia la siguiente estación. Sabemos que hacer juntos un viaje emocional y emocionante, lleno de afectos, es la mejor propuesta; el respeto, el mejor aprendizaje; la cooperación, la mejor compañera de viaje; y la escucha, el mejor camino a seguir. También sabemos que nos acompañarán sorpresas agradables en algunos casos y, quizás, tristezas en otros. Será un trayecto lleno de desafíos, sueños, fantasías, esperas, despedidas… y tenemos la obligación de hacer que el viaje sea lo mejor e intenso posible.

A lo largo de las diferentes estaciones del camino, son muchos los pasajeros que irán subiendo y bajando de este tren. Por ello, queremos dirigirnos en principio a nuestros alumnos y alumnas. Nos gustaría deciros que habrá pasajeros, tanto compañeros y compañeras como maestros y maestras, que os acompañarán en este viaje y compartiréis el mismo vagón. Algunos comienzan el viaje con vosotros, otros se subirán a mitad de camino, otros se bajarán antes de llegar y otros permanecerán con vosotros hasta el final. Pero seguro que muchos de ellos serán muy especiales y significativos y dejarán una huella imborrable. Tan solo tenemos que relacionarnos bien con todos los pasajeros, buscando lo mejor de cada uno y dando lo mejor de nosotros mismos.

En cuanto a los maestros y maestras que compartimos el mismo viaje y en algún momento nos subimos a este tren del Manjón, nos gustaría recordaros que puede que nuestro trayecto sea corto y nos bajemos en la siguiente estación o que el viaje dure varias estaciones; puede que viajemos en vagones distintos… pero no olvidemos que todos esos vagones están conectados entre sí y viajamos juntos en el mismo tren hasta que lleguemos a la próxima estación. Es necesario que haya coherencia entre lo que decimos, lo que sentimos y lo que hacemos; que el optimismo nos inunde, sin necesidad de dejar a un lado el realismo con el que trabajamos cada día. Desde este tren, borremos pesimismos y tristezas en los rostros de nuestros pasajeros; si no sale el sol lo pintaremos en sus ventanas, sabiendo que la ilusión es válida si va cogida de la mano de la realidad. Lo que realmente nos hará felices, es pensar que colaboramos para que el equipaje de nuestros alumnos y alumnas vaya creciendo cada día y se vuelva valioso. Hagamos que nuestra estadía en este tren haya valido la pena. Que cuando llegue el momento de bajarnos, nuestro asiento vacío deje añoranza y bonitos recuerdos a los que permanezcan en el viaje.

A los padres, madres, familias en general y resto de la comunidad educativa, todos sabéis que los girasoles extraen su energía del sol, pero cuando este no sale se miran entre ellos. Ese queremos que sea el viaje del “Tren del Manjón”, un lugar donde nos miremos entre nosotros para apoyarnos y llenarnos de energía sabiendo que la cooperación es uno de los pilares básicos de la verdadera educación.

Y nosotros, como los nuevos maquinistas de este tren, tenemos mucha ilusión en conducirlo a una buena velocidad y así poder disfrutar de su suave traqueteo por tierras “hueteñas”. Aunque a veces podamos tener acelerones o frenadas bruscas, intentaremos que sea un viaje cómodo y relajado donde disfrutemos juntos de los paisajes que atravesemos a lo largo del trayecto. Ya solo nos queda desearos un…

¡¡FELIZ VIAJE ESCOLAR 2018-2019!!

Equipo Directivo del C.E.I.P Padre Manjón